En el día de hoy se iba a llevar a cabo la reunión provincial entre la Consejería de Educación y los Sindicatos Docentes con representación en la Mesa Sectorial, para acometer el proceso de modificación de las Plantillas jurídicas de los Centros Educativos Públicos de Enseñanzas No Universitarias para el curso 2020/21 de la provincia de Burgos. Esta modificación (supresiones/amortizaciones o creaciones de puestos de las plantillas jurídicas) determina, junto a las jubilaciones, las vacantes que se ofertan en los concursos generales de traslados.
Ante esta situación, CSIF, UGT, CCOO , Organizaciones Sindicales con representación en la Mesa Sectorial de Educación, manifiestan su decisión unánime de no entrar a negociar plantillas. La ruptura del acuerdo que implantaba la jornada de 35 horas junto a la perpetuidad de los recortes que se manifiestan en estas plantillas son argumentos más que de peso para haber tomado esta decisión conjunta.
La creación y supresión de plazas se hace en base a unos criterios impuestos por la Administración, teniendo en cuenta datos de matriculación, ratios y horario lectivo fundamentalmente. El documento de criterios sigue sin recoger las reivindicaciones de calado que el conjunto de organizaciones sindicales venimos exigiendo desde hace mucho tiempo para este proceso de modificación de las plantillas jurídicas. El documento de criterios es puro reflejo de la aplicación a rajatabla de la normativa de ratios máximas y de otras medidas de recorte impuestas por las diferentes administraciones educativas. Entendemos que son criterios economicistas, asentados en los recortes y que no tienen en cuenta las necesidades pedagógicas y la despoblación que sufre nuestra Comunidad. Igualmente, nos parece un despropósito incluir propuestas de transformación de plazas ordinarias en plazas bilingües, cuando no se sabe nada sobre el modelo bilingüe en Castilla y León, paralizado desde principios del año pasado.
Si todo este proceso de falsa negociación , con unos criterios impuestos y altamente gravosos para la estabilidad de las plantillas docentes, especialmente en el medio rural, ya era una auténtica vergüenza, la situación aún se agrava más este año por el incumplimiento del Acuerdo de 21 de mayo de 2019 , mediante el que se contemplaba la reducción horaria docente a partir del 1 de septiembre de 2019. En el ámbito docente, su aplicación implicaría una reducción de jornada lectiva, que debiera trasladarse en este proceso de plantillas en el que estamos inmersos, facilitando la creación y mantenimiento de puestos docentes.